22 diciembre, 2006
A Belén Pastores
Yo ya vi esa obra hace unos 3 o 4 años y me encantó, me reí mucho. Además recuerdo a la Princesa Amnesia como si fuera ayer(salía en la obra, te acuerdas Amnesia?).
A mí todo esto me resulta de lo más estimulante y me emociona, que todavía en los tiempos que corren haya gente que deje por un momento todo apartado y dedique su tiempo de una forma tan generosa, tiene mucho mérito y desde luego mi admiración. Y no es sólo aprenderse un papel y representarlo. La obra la dirigen ellos de principio a fin, por lo que estuve leyendo en su web. Los decorados, el vestuario y todo se lo buscan ellos mismos, así como los sitios donde la representarán.
Bueno pues... esto es una llamada a los que estén por ahí cerca que vayan , que no pierdan la oportunidad porque no se arrepentirán.
Pedro o cualquiera que le apetezca pasarse por aquí y contarnos un poco más, ya sabe.
Muchísima suerte a todos con la obra.
Un abrazo.
19 diciembre, 2006
Milo
Cuando ella dice Milo, yo escucho la profundidad de la tierra. Su voz nocturna, sensual y honda brota desde el magma. Y en ese nombre me balanceo. Milo, universo donde se suspende el tiempo.
Cuando ella dice Milo, veo un sendero; años luz, llamas frías, sombras turquesas, en esa voz y la materia impalpable que la envuelve. Puedo caminar sobre las aguas. unida por un hilo finísimo y transparente de percusión que me lleva, me arroja sin remedio a un enigma indescifrable; a una espiral de calma, a una atracción más fuerte que la telúrica.
Es otro paralelo. Otra magnitud, otro lado, a tan sólo 4 minutos 55 segundos de ti, de mí. Y atravieso esa gruta de misterio donde soy capaz de entender que hay otro territorio. Más allá de todo lugar. Una eternidad contenida en ese parpadeo de cuerda. Dormir y volver al mismo sueño es posible, Milo.
Último naufragio, estrella celeste, cuerpo de metal:
Milo.
Blanco
La niebla, José Mateos
*
Tus manos serán un milagro en los cuerpos enfermos.
16 diciembre, 2006
13 diciembre, 2006
Conjuros I
"... y la luz empañada "
Tu ráfaga, tu huída.
Mi verdad, mi signo.
Que no haya un río tan ancho
y siempre un puente que lo cruce.
12 diciembre, 2006
Oficio de Cobardes
Nadie es perfecto, claro, y nadie sabe
que por eso está vivo, que le debe
la vida a sus defectos, que vivir
es tarea de astutos, de cobardes.
Si hemos sobrevivido a aquel dolor
que amenazaba con aniquilarnos
es porque no supimos sufrir como queríamos
y fuimos incapaces de fallecer en él.
O fue la vida, que se ama a sí misma
más que nosotros, la que lo impidió.
El miedo es, a menudo, un buen refugio.
La pereza protege. La cobardía salva.
Quizá exagero para que me entiendas:
si seguimos viviendo lo debemos
a no saber sentir, al deterioro
de nuestro asombro, al miedo
y a la astucia de los supervivientes.
Yo sé bien que la muerte se enamora
de los mejores, se los lleva pronto.
Los demás olvidamos si podemos
que no somos lo que desearíamos,
que la memoria inventa lo vivido
para ayudarnos a seguir viviendo.
Todo nuestro saber es nuestra astucia
en adaptarse al medio, en ir tirando,
en adaptarse al miedo, en no morir.
Y así nos va, nos vamos
perdiendo el tiempo, devorando días
y llevando la vida que podemos
por no saber llevar la que soñamos.
Juan Vicente Piqueras
29 noviembre, 2006
La Niebla
Dicen que en la oquedad de algunos pozos,
entre sus grietas, donde crece el musgo,
hace su nido a veces algún pájaro
y entona desde allí su canto incierto.
Dudas y cantas: ésa es tu creencia.
Salvar un poco de ese instante único
que llega a ti como un deslumbramiento,
como una sacudida que deshace
y diluye fronteras, cotos, límites...
Porque también el tiempo, cuando quiere
y se detiene en medio de dos cifras,
es un peso que eleva, es como un bálsamo
que alivia el daño de vivir sin rumbo,
de estar perdido en donde nada es nada
y todo cambia de sustancia y forma.
Vive y alégrate. Muerde la fruta
que es ser y respirar hoy todavía
aunque, al comerla, su sabor amargue.
Entra sin miedo hasta un lugar más hondo:
no hay caminos que salgan de este bosque.
Vuela a tu lado el cuervo y sientes frío.
Tus manos palpan una puerta, un muro.
Se oye a lo lejos un rumor de agua.
Te cercan voces, pasos de otra vida.
Y tu casa está aquí: es esta niebla.
José Mateos
26 noviembre, 2006
Noviembre
Sólo hay un vacío (incierto)
que ninguno conoce
que ya habitamos.
Abandónate"
25 noviembre, 2006
La Idea del Norte
Nocturno
a los que escriben nombres en la nieve
en la noche desnuda del estío.
El canto seco de la tierra ciega
es de cristal y lo dicen los grillos;
hay un enjambre azul de altas estrellas
que no vuelan, y hay unos leves hilos
que nuestros ojos unen con belleza.
Desde mi ardiente soledad yo miro
las sombras de este cuarto, tan espesas,
y el campo no visible al que yo aflijo
con ese pensamiento del que vela
sabiéndose de carne. ¿Algo es mío?
Muy lejos, se reúnen las casas; son inciertas
y agrupadas sus luces junto al mar: hay un ritmo
de olas negras y sordas. La alegría gobierna,
en esos territorios, el vivir. Yo respiro
la oscuridad tan mía, mi vida no está cerca
del agua ni del cielo,
ni tampoco de aquello que deseo.
El otoño de las rosas
21 noviembre, 2006
Mauro
¿No te parece, Mauro,
que cuatro años son demasiadas excusas
para no habernos encontrado ya
en mi boca?
18 noviembre, 2006
Dudas e indecisiones II
No sé qué es peor...
¿que nos utilicen o que, aún sabiendo que sucede, sigamos aceptándolo?
15 noviembre, 2006
Miradas desde Musairibo
Miradas desde Musairibo
Dice justo a la entrada:
Para escribir se necesita estar en un lugar lejano...
Y tiene razón. Es como este faro tan lejano en el espacio,
en el tiempo y sin embargo...
13 noviembre, 2006
Curiosidades II
Qué será eso que pasa por tu pensamiento cuando a la pregunta ¿En qué piensas? respondes sonriendo y en un movimiento rápido, repentino, como salido de tu sueño: Nada .
Como si esa palabra fuera un visillo tras el que resguardarse. Como la última nota de una escala musical... inaudible.
08 noviembre, 2006
22 octubre, 2006
Cultivo Ortigas
El corazón es ave que no olvida.
Huidiza, rapaz, es muy difícil
cazarla o comprenderla.
(...)
Juan Vicente Piqueras
20 octubre, 2006
17 octubre, 2006
16 octubre, 2006
Otra Figura del Insomnio
hoy en estas horas lentas y altivas como el mar, tan silenciosas como un hilo negro, a las que llamo con el nombre pobre de insomnio. Maníaco, ayudado de pastillas y médicos, de torpes consejos y de un turbio rencor estéril, he combatido durante años al frenesí parsimonioso de este velar, sin querer ver que en él mi soledad se iba transfigurando en una especie de macabra fortuna. Pues estas madrugadas, casi estalladas de silencio y verdad, a cambio de unas migajas de salud me dan mucho: traen nombres y fantasmas de nombres; me aproximan el pezón en donde bebo el raro caldo de la necesidad de amar, y me sacio; me traen mi miedo, del ronzal, que llega casi pensativo, como un cabeceante caballo del invierno; me traen el vértigo del tiempo, inusitado, sin un solo apellido; me traen un sobresalto de distancia, picoteada de galaxias y de interrogaciones, me traen , oh disomío, trigo sin pan, peines rotos, botones caídos, deseos sísmicos y turbulentas pesadumbre; me traen el rostro de toda mi memoria, abarrotada como un mapa e injuriada por las premoniciones. Me traen mi inapelable y escocido abrazo con el universo.
(...)
Las horas hondas se me arriman a la conciencia y con tortura y generosidad me transforman mi tránsito en un alud de percepción: u entonces pareciera que al horror le nacen bisagras para sujetarse a sí mismo, que las carencias asumen los contornos de su barranco, que se amortigua la violencia de la esperanza, que la resignación se pude, que el amor se desviste para mostrar su ingenua pústula de caridad. que todo se puebla de pasos, de perfiles y contraluces, de formas y resonancias, de sílabas mojadas, de encuentros ininteligibles y sobreviene una armonía innominable, llena de perfume y de azufre; y todo es natural y sombrío, y perverso, y emocionante.
Luego, después de esa cosecha misteriosa, de la que soy la espiga y la hoz y el cercén y el rastrojo, extenuado por la desmesurada coherencia, suelo limpiar el icono de ayuno y toda la porción de sed, y me quedo dormido, mientras siguen cayendo la vida sobre mi corazón, gota a gota, sin tregua. Y entra un folio de frío por las rendijas de mi dormitorio.
Un folio blanco, oscuro.
Félix Grande
...mientras sigue cayendo la vida sobre mi corazón y vengo del frío a escribir en este folio oscuro, en blanco.
11 octubre, 2006
Pág. 59
(...)
Las cosas
tienen voz, tienen bordes interiores
a los que nunca llega la caricia,
porque nunca la mano llega a tocar lo que el misterio toca.
Parecen quietas y calladas, pero
nunca deja de hablarnos su silencio:
son lo mismo que el agua,
que nunca se detiene ni pregunta, sólo
transcurre, y es un canto
de vida su transcurso.
Pedro A. González Moreno
(Media hora y apago la luz.
Dulces sueños)
09 octubre, 2006
Dudas e Indecisiones I
“… Como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden...”
¿Pero realmente perdonamos a los que nos ofenden?
.
08 octubre, 2006
07 octubre, 2006
06 octubre, 2006
24 septiembre, 2006
Intacto
No es nada fácil tener el corazón divido en geografías. Sumergido por oceanos. Hecho de llanuras. De asfalto. De estaciones interminables. Bifurcado en una dirección y otra, en ambas, en todas. Fragmentado. Cruzado. Terciado. A veces roto.
.
22 septiembre, 2006
Desde Otra Latitud I
Divergencias
La verdad es que el café de los bares me parece un improperio.
Un insulto, un ultraje, un abuso, una injuria, una maldición y una broma de mal gusto.
(por mucho que ustedes digan que yo exagero...)
19 septiembre, 2006
El Viaje
de horas que se alargan desmedidas..."
Ricardo Bellveser
El Agua del Abedul
15 septiembre, 2006
En forma de espiral
Se miran, se presienten, se desean,
se acarician, se besan, se desnudan,
se respiran, se acuestan, se olfatean,
se penetran, se chupan, se demudan,
se adormecen, se despiertan, se iluminan,
se codician, se palpan, se fascinan,
se mastican, se gustan, se babean,
se confunden, se acoplan, se disgregan,
se aletargan, fallecen, se reintegran,
se distienden, se enarcan, se menean,
se retuercen, se estiran, se caldean,
se estrangulan, se aprietan se estremecen,
se tantean, se juntan, desfallecen,
se repelen, se enervan, se apetecen,
se acometen, se enlazan, se entrechocan,
se agazapan, se apresan, se dislocan,
se perforan, se incrustan, se acribillan,
se remachan, se injertan, se atornillan,
se desmayan, reviven, resplandecen,
se contemplan, se inflaman, se enloquecen,
se derriten, se sueldan, se calcinan,
se desgarran, se muerden, se asesinan,
resucitan, se buscan, se refriegan,
se rehuyen, se evaden, y se entregan.
Oliverio Girondo
11 septiembre, 2006
Reloj de Pasajero
(El poema es de Juan Vicente Piqueras,
el reloj es mío pero cuando llego a casa siempre me lo quito,
La tarjeta de embarque, como una de tantas, la utilizo de marcador de libros)
09 septiembre, 2006
Decorum
¿ Y si el vivir no fuera tan distinto
a una pared desnuda,
a una madera ajada,
a aquel objeto al que otorgar su espacio?
¿Y si no fuese más que esta tarea
de encontrarnos decoro, dignidad a un destino,
un poco de belleza en que ampararnos,
bajo un techo con paz que nos acoja?
¿Y si el pensar no fuera diferente
a este limpio trabajo de concierto
entre las meras cosas y el espíritu,
a este deer menor de hallar un ámbito
propicio al corazón, entre las cosas?
Con simpatía por lo desvestido,
con el apego pulcro hacia lo pulcro,
la vida mueble se nos rinde amiga.
Lo delicado todo
nos honra y nos regala.
Lo bello verdadero
es nuestro bienestar y nos conforta.
Cuando nos remontamos hasta el vértice,
cualquier ocupación llega a su música.
Y no hay afán inútil
para el único afán de ser felices.
Carlos Marzal
05 septiembre, 2006
Una Directa
¿ Ustedes qué hacen con la otra persona que son?
.
03 septiembre, 2006
Terciopelo
Solveig Slettahjell y su voz de terciopelo.
No es nada nuevo, pero es lo que estaba escuchando mientras cae la noche suavemente al otro lado de la ventana.
01 septiembre, 2006
Inmóvil
.(Yo también tengo un bosque. Así pende la luz en febrero y sabes... podría pasar horas aquí, días, y más días sólo mirando, inmóvil. )
es causa mortal. Herido
de transparencia, mi
corazón se oculta en la belleza."
Antonio Gamoneda
Sublevación Inmóvil
30 agosto, 2006
De Norte a Norte
.
Siempre hay alguien que escucha el eco de una llamada lejanísima, y responde...
ya sea desde el borde de un cantil, o la alta marejada de un estanque.
28 agosto, 2006
26 agosto, 2006
Gamla Stan
Porque es curiosa la geografía del silencio, y cada una de sus curvas de nivel como trazos imaginarios de una constelación de brillo oculto, habitando los adoquines de esta calle, que todavía hoy- como este poema- recuerdo.
Escribiré el silencio
y le pondré tu nombre cuando pueda
el dolor escribirse.
Será una carta breve, tal vez de esas que nunca
se terminan del todo, pero en ella
estará el mundo escrito,
y su única página
la mandaré doblada con bordes de perfume
lo mismo que un pañuelo
donde alguien ha guardado la mitad de su vida.
Con la caligrafía de la espuma
con la que el mar escribe, tan minuciosamente
los nombres de sus islas,
yo escribiré el silencio, que en ti adquirió la forma
de un insólito mapa de callada ternura.
Y quemaré un poema
para ver si en su lumbre me hablas todavía
para ver si en su humo
tú también deletreas
estas sílabas rotas
de la voz con que te escribo.
Pedro A. Gonzalez Moreno
23 agosto, 2006
La Extraña Fruta
"...Lady Day las gaviotas heridas vuelven a la luz del puerto
Extraña furta en el aire el crepúsculo se ausenta...
Lady Day el amor como una libélula..."
Pere Gimferrer
Hoy me apeteció a media tarde escuchar la voz de esa extraña fruta, que veces duele. Y recordé la página 213 de este libro y volví a leer ...
21 agosto, 2006
Mi vaso es un trozo de hielo con sabor amargo pero sigo en pie y te miro. Hoy caminas sola. Las otras como tú, en noches como esta, tienen un lugar, no más humano, pero más cálido donde pagarán por su carne un precio más alto. Porque sus sonrisas todavía no están tan desgastadas, porque su piel es tersa y porque el mundo está hecho de medidas... que tus caderas no respetan. Pero la noche es injusta, mientras tú intentas manejar el mínimo paraguas para que tu pelo platino y cardado no se caiga lo mismo que se desploma el cielo sobre nosotras. Te contemplo desde el otro lado. Al fin y al cabo, lo mío es el capricho de buscar mi propia herida y ahogar la culpa en el limón y esta lluvia ácida, y por eso decido estar a pie quieto en la escalera de algún bar esperando, queriendo que el agua me lleve… Pero tú… Hace falta ser una diosa de piel etrusca para reinar sólo en la luna de los coches, para estar aguantando a que pase alguien que desee pasar contigo la oscuridad como excusa; como remedio; como último refugio a un precio de ridícula metáfora.
Sobre tus tacones de aguja altos altos, salpican el barro en cada paso tus piernas firmes de cristal… opaco después de tantas veces. Tus pisadas cortas, estrechas por la brevedad y rigidez de tu falda. Porque tu cintura no es de avispa y se dibujan los años en tus ojos. Porque se derrite tu mirada surcando la tez de rimel negro; porque el día es postizo como tus pestañas. Porque no tienes nombre. Porque necesitaste tres noches para pagar tu perfume rancio. Porque el frío es demasiado y tu escote miente...
Y por una vez, quisieras dormir en casa con una bata de lana amplia sin el corsé que aprieta tanto el costado…. Y yo aquí mirando el humo en las ventanas con el puro deseo de castigarme esta noche… Porque no sabes mirar los mapas, ni la geografía fuera de un cuerpo extraño; porque cierras los ojos cada vez que bebes, y tu sonrisa nunca brilla ; porque de los cines sólo conoces las esquinas; porque para sostener así la noche, entre las manos, hay que tener tanto valor…
16 agosto, 2006
de Lugar
(Este poema--como la lluvia- es también un adverbio de tiempo. A veces llueve; a veces lo recuerdo.
A veces:
Siempre...)
Adverbios de Lugar
Aquí es donde estoy yo. Esté donde esté
yo siempre estoy aquí donde me ves.
Esta casa, estas caras, estas cosas
cansan, porque aquí cansa.
Aquí hace sed de irse, sed de allí.
Pero allí es el lugar donde jamás podré estar,
donde yo soy imposible. Vaya adonde vaya,
allá donde yo llegue será aquí
y estaré ya esperandome a mí mismo
con un ramo de rosas iguales en la mano.
Ahí es tu aquí.
Ahí parece un grito porque es donde te duele.
Yo quiero estar ahí, donde estás tú,
tú aquí o, mejor los dos allí, remotos, juntos
porque lo vivo es lo junto.
Ahí hay el amor que no hay aquí.
Esas cosas tocadas por tus manos,
eso que piensas, dices, callas, sueñas,
esos lugares donde estás sin mí,
eso deseo, eso necesito.
Y ser tu ahí, tu aliento intercalado.
Allí es la salvación, el espejismo
nacido de la sed de estar aquí.
Allí sí que seriamos felices,
donde tu aquí, y mi ahí estarían juntos,
comerían perdices que no existen.
Allí es la lluvia aquella
que cae sobre este páramo sediento.
Allí es Jauja, el Dorado. No hay palabras
que puedan dar idea de aquel sitio.
Las palabras son éstas, nonca aquellas.
Yo estoy aquí y tú ahí y allá nosotros cuándo.
Esto es piedra. Eso es seda. Aquello es mar.
Aquí, hogar imposible, íntima ausencia,
odiado domicilio, cárcel de cada día.
Ahí, calor del tú, tu vida mía,
tesoro de tu isla, aire de amor.
Allí, es donde no estamos, llueve sobre la vida
que nunca será nuestra y nos aguarda.
Juan Vicente Piqueras
11 agosto, 2006
Inquietudes de Alguien que...
- como una inquietud-
siempre quedó entreabierta.
(Cuando me quedo pensando, a veces, la cruzo...)
Inquietudes de Alguien que...
.
06 agosto, 2006
30 julio, 2006
Un tren azul
Hay trenes que no acaban de llegar
y trenes como el tiempo
que nunca se detienen.
Hay trenes que son dudas
y trenes que no existen y tomamos.
Trenes entre paréntesis,
guardagujas en medio del desierto.
Hay trenes inventados por la espera
y trenes que atraviesan, vacíos y atrevidos,
los desiertos que somos, piel adentro.
Cómo ángeles enfermos
gimen su sed los huesos deseando
el agua mineral del horizonte.
Hay trenes blancos como el luto chino,
como el insomnio, música de huellas.
Esqueletos de tren, radiografías
de infancias felizmente fallecidas.
Hay trenes que chirrían en los huesos
y trenes que transparentes que atraviesan
el cielo como el tiempo, como aves
que nunca anidan, nunca se detienen.
Juan Vicente Piqueras
(No me detengo)
27 julio, 2006
23 julio, 2006
De ida y vuelta
Lo importante es irnos
y no donde vamos
y nunca llegar más lejos
que antes de partir.
Claudio Rodríguez Fer
.
19 julio, 2006
Pasión
Cuando las golondrinas enloquecen
y rondan mi corona de ceniza,
el olor de la lluvia o la voz que he perdido,
¿qué palabra hallarán?
¿Que espina buscan?
14 julio, 2006
The Wall
Dixon dedica este poema a todas las personas que atraviesan un mal momento en sus relaciones.
The Wall
I am the wall, for most of the time I am invisible to you, just there
but I surround you on all sides keeping the wolves out and keeping you safe and warm at night.
I am the bearer fo all your memories; both imaginary and of fact. when you take them away I am scarred for life.
You build me up and adorn me and then knock me down. but I never complain, because I am the wall. always silent silent,
hiding my feelings, always their for you until you leave.
09 julio, 2006
Puentes
que jamás abandonan, al pasar, a sus puentes"
Pedro A. González Moreno
05 julio, 2006
03 julio, 2006
Más allá
Cuando
nos abrazamos
vamos
a otromundo
donde
nos abrazamos
y marchamos
a un trasmundo
donde
nos abrazamos
y donde tal vez sólo
nos abrazamos.
Tigres de Ternura
28 junio, 2006
23 junio, 2006
El Frío
(Tres días después)
A brickbybrick y Rachel que me preguntaron por el frío,
los refugios y me dejarón pensando...
No lo veo melancólico, ni triste y desde luego si eso es lo que se ha visto aquí (en el post anterior, en este) no es lo que pretendía. Refugiarse no lo entiendo como un acto lánguido o triste es sencillamente ganas de estar con uno mismo. Curiosamente debe ser que de alguna manera me inmunicé porque por extraño que suene después de tanto no me resfrié ni una sóla vez. Me gusta el frío y la quietud invernal me inquieta, me conmueve.
Sí Rachel, me refugio. De vez en cuando. Y voy muy lejos a veces, otras a ninguna parte; otras en los puntos suspensivos; en un cruce de caminos; en la música; en las rayas de una cebra; en un racimo de uvas; en este cuaderno negro o en espacios en blanco; y … en el frío. Me gustaría hacer ese viaje ¿Sabes si llega algún barco allí?
20 junio, 2006
The book of Secrets
Un 18 de diciembre en el ferrocarril trans-siberiano seguía presente en su mente la Divina Comedia de Dante mientras contemplaba el paisaje que pasaba delante de su mirada, pensando en la gente que vive en él y en cómo compartirán esta condición humana... ¿Estamos ayudándonos o haciéndonos daño?... ¿Cómo ha llegado "Occidente" a este lugar de transición? ¿De una manera honorable? ¿Qué les traemos? ¿Cuáles son sus expectativas? ¿ Son nuestras vidas realmente como ellos imaginan?
Siempre queremos creer que hay un lugar mejor que el nuestro...
y cabalgar de noche a través del Caucaso...)
17 junio, 2006
¿Es ésta la pregunta?
Desde que amaneció estoy girando sobre esto ...
Sándor Márai
El Último Encuentro