31 marzo, 2006

Acotación

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Es tan fiero el mar como lo pintan.



25 marzo, 2006

Espuma

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No hablaré del mar.




Espuma


Miro la espuma, su delicadeza
que es tan distinta a la de la ceniza.
Como quien mira una sonrisa, aquella
por la que da su vida y le es fatiga
y amparo, miro ahora la modesta
espuma. Es el momento bronco y bello
del uso, el roce, el acto de la entrega
creándola. El dolor encarcelado
del mar, se salva en fibra tan ligera;
bajo la quilla, frente al dique, donde
existe amor surcado, como en tierra
la flor, nace la espuma. y es en ella
donde rompe la muerte, en su madeja
donde el mar cobra ser, como en la cima
de su pasión el hombre es hombre, fuera
de otros negocios: en su leche viva.
A este pretil, brocal de la materia
que es manantial, no desembocadura,
me asomo ahora, cuando la marea
sube, y allí naufrago, allí me ahogo
muy silenciosamente, con entera
aceptación, ileso, renovado
en las espumas imperecederas.


Claudio Rodríguez

17 marzo, 2006

Sin más

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La noche se desgarra...



08 marzo, 2006

La Sed a Nosotros

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(A veces pasa, que sin doblez, humildemente, uno se equivoca;

y entonces, te preguntas en silencio « ¿de qué sirven las palabras? »)



La Sed a Nosotros

Lo mismo que las calles conducen a otras calles,
los pasos a otros pasos y la sed a nosotros,
la incierta claridad de la mañana
ilumina el cansacio
de buscar sin descanso a quien nos busque.

Tal vez en una esquina de la noche
nos hemos visto y nunca lo sabremos.

Lo mismo que las horas nos llevan a otras horas,
los días a otros días y el dolor a nosotros,
las manos del amante no encontrado
nos entragan un ramo de renuncias
y la promesa de no morir solos.

Mientras, tal vez, su cuerpo,
ahuyentado por nuestra propia urgencia
en encontrarlo, se nos va adentrando
en la sangre, en el sueño
a través de las calles o ayer o estas palabras.

Juan Vicente Piqueras



03 marzo, 2006

Entonces los Recuerdos

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¿ Y si haces el viaje... completo ? ¿Te atreves?
.....Felicias Journey



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Si pudiera tocarse la memoria,
suavemente irla acariciando
con la misma piedad con que se toca
un traje muy usado,
¿qué tamaño tendrían
entonces los recuerdos, y qué tacto
su piel carnosa y tibia?
¿Qué color o qué aristas de sólida ternura
tendría la memoria
al quedar atrapada entre los dedos?

Si pudieran tocarse los recuerdos,
qué resplandor para las manos, qué
claridad abierta de pronto entre las cosas
al derramarse en ellas la memoria
lo mismo que una lava que jamás se enfriara.

Pero no tienen cuerpo
ni sombra los recuerdos;
nosotros fuimos ese
relieve de materia
que alimentó su lumbre o su espejismo
y hoy somos sólo carne puesta en pie, sostenida
por un armazón frágil de recuerdos:
un delicado tallo
como de vidrio oscuro
que sostuviera el brillo sin peso de la luz

Y si ese leve tallo de pronto se quebrara,
la carne lentamente se hundiría
lo mismo que esos barcos
que han olvidado el nombre de sus puertos
y deciden hundirse
porque ya no les queda más salvación que el agua.

Pedro A. González Moreno


02 marzo, 2006

El Reino de Florin


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El Reino de Florin



(Aquí suelo parar a tomar café, antes de comenzar el día)


Pirata Roberts... ¿andas cerca?

01 marzo, 2006

Apenas, Marzo

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"Dos llamas pueden

entrelazarse en una sola luz,
pero dos pieles tienen
sonidos muy distintos al rozarse,
son bordes diferentes de una misma distancia..."

Pedro A. González Moreno