08 octubre, 2006

Ahora


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Amanece Lady Day, la luna se nos escapa...

10 comentarios:

Anónimo dijo...

Lejos en distancia terrestre, no lo debemos estar tanto en la espacial, ya que vi esa misma luna y no otra, la recozco claramente por la fotografía, ese mismo día, pero desde el barrio madrileño de Malasaña.

Paralelo 49 dijo...

Qué sorpresa más agradable verte a este lado París. La distancia entre Madrid y yo siempre será mucho más que terrestre, incluso las veces que he vuelto ha seguido siendo un lugar remoto. Sin embargo la luna no me quedará nunca tan lejos.

Malasaña… ¿No es allí donde hay unos locales tan inéditos como antiguos, con fotografías de antepasados; con muebles oscuros que crujen los años; con pañitos de croché sobre las mesas; con espejos cansados que irradian edades, espacios y secretos en sus manchas discretas?. ¿No es allí donde las chicas chinas venden rosas; donde hay intrigantes pasillos en forma de L? Malasaña… cómo olvidar sentarse en el suelo y apoyarse en una pared de color indescifrable a beber licor de ambar. Malasaña…

Saludos París 59. Y sí, era justamente esa. La misma. No otra

Gonzalo Paredes dijo...

Paralelo..., mire usted, esa luna..., esa luna está en todas partes.
En todas.
Se lo aseguro y ahora mismo la estoy admirando.

Gracias por la imagen.

Gracias, y saludos.

Paralelo 49 dijo...

¿en todas?

Gracias a usted,

Anónimo dijo...

Ah, los pasillos en L grandes que una bailarina recorría en bicicleta estaban en Argüelles. Las casas de Malasaña no son de 250 metros.
Y Malasaña es ahora uno de los barrios más vivos. Para mi gusto excesivamente "cool", por lo que tiene ese movimiento de "moda". Encerrado entre el centro de arte Conde Duque y la calle Fuencarral entre el tramo Bilbao Gran Vía, donde se reúnen las tiendas de moda juvenil, que divide Malasaña de la zona de Chueca, la zona gay, desbordante de vitalidad, Malasaña dejó atrás los paños de croché y el olvido. Le acecha el problema de ser utilizado masivamente por el resto de la ciudad. Pero en estos momentos es el barrio más activo. Sobre todo las noches de viernes y sábados, cuando el tiempo permite mantener abiertas las terrazas: las calles se llenan dejóvenes y resulta difícil hasta pasear.
Has de venir a ver el cambio, pero no podrás beber licor sentada en el suelo y apoyada en la pared, porque una ley impide beber en la calle (hay quien lo sigue haciendo, pero no con tranquilidad).
En el blog llamado "Seré tu accidente si tú eres mi ambulancia" se pueden encontrar fotos interesantes del arte de calle en Malasaña.

Saludos

Paralelo 49 dijo...

No, si no era en la calle donde bebía, era en el Café la Palma. Un lugar bastante raro, estrambótico donde los haya. Oscuro. No había sillas sino grandes cojines en el suelo. La primera vez que fuí allí me daba cosa apoyarme en las paredes por el color tan incierto. . Era un lugar inquietante . Guardo dos fotos de aquel sitio. Lo que no sé es si las encontraría ahora...

Nunca bebí en la callé, no me gusta, como tampoco las longsdrinks.

Cerca de allí, del Café La Palma, estaba esa otra cafetería. La encontramos de pura casualidad un día que divagabamos de calle en calle .

Fuencarral sí claro, yo vívía cerca de la glorieta de Quevedo.

Quizá encuentre el café La Palma si vuelvo ¿se llamaba así?

Anónimo dijo...

Cierto, ahí sigue, totalmente renovado. Lo sé porque he pasado por fuera, pero casi nunca he entrado.
Ahora, si ese café te parecía estrambótico, lo que encontrarás ahora en Malasaña puede parecerte extraterrestre.

Un abrazo

Paralelo 49 dijo...

Pues entonces cuando vuelva iré allí, a recorrer ese espacio sideral.

Besos
P.49

Pd:Claro que si está renovado no sé si tendrá el mismo encanto...

Anónimo dijo...

Paralelo49: ¿fotografió usted ese melocotón con apariencia de luna mordida? Está que atrapa, sí.

Paralelo 49 dijo...

Sí.Todas las hice yo. Es como un album con pequenhas anotaciones. Celebro que el melocotón le guste.